Piloto: Juanjo (MicMic)
Meteo:KIDA
240100 22005KT 10SM SCT060 SCT085 25/09 A3010
Aeronave: C208
Simulador: MSFS2020
El encargo del vuelo no nos había sorprendido, pues habíamos operado con anterioridad en esa pista, pero, por eso mismo, insistimos mucho en las condiciones del contrato de transporte, especialmente en el último párrafo donde, con letra más grande y resaltando las cuestiones mas importantes, dejábamos claro que el vuelo podría retrasarse, o cancelarse, dependiendo de las condiciones operacionales, sin que hubiese compensación alguna.
La pista de Lower Loon Creek, tiene 365m (1200') de largo declarados, (se pueden hacer “más largos” acercando el avión a mano en el borde del comienzo de la pista), que es el límite de operación del avión, pero, está a 4000' y en esta época del año se pueden tener vientos temperaturas que impedirían el aterrizaje, y, sobre todo, el despegue de un sitio tan complicado. Tendríamos que afinar mucho en la planificación de los vuelos.
Para la ida hicimos un plan de vuelo IFR, aunque luego, en condiciones VFR, recortaríamos y lo haríamos “en contacto”, solicitando seguimiento del vuelo por parte del control aéreo. Así no tendríamos que preocuparnos por estar “pinchando” nubes, aunque la aproximación en el destino debería ser completamente en visual. Antes de salir confirmamos las condiciones llamando a Fred, el encargado del camping, que nos dio la información necesaria de viento y nubes, porque las cámaras web de la pista no estaban operativas, y las nubes que había en Idaho Falls estaban demasiado bajas, temiendo que pudieran oscurecer los picos montañosos.
Fred pasa casi todo el año en la zona, y aprovechando nuestro vuelo me preguntó si era posible traer a sus dos hijos en el viaje de vuelta.
“Sin problema, Fred, pero volvemos a Idaho Falls...”
“Si, claro, mis hermanas están allí, y les apetece ver a los primos antes de empezar el curso”
“Pues nada, que se preparen, que la escala es corta”
Otra cuestión era el combustible; con los consumos estimados, dejamos 100 galones en los depósitos que deberían darnos lo suficiente para ir al destino y tener una reserva de 45' al aterrizar en Idaho Falls de nuevo. Las previsión se mantenía en condiciones VFR hasta el día siguiente, así que no esperábamos demoras por ese lado.
![]() |
En crucero a 10.000' |
Ya solo hacía falta que llegaran los clientes para iniciar la marcha, y como suele ocurrir, uno de los pasajeros, Adam, se retrasaba... pero estaba en camino. El resto, Benjamín, Caleb, Daniel, Ephraim, Florindo y Gideon ya estaban empezando la juerga antes de subirse en el avión. Alguno sobrepasaba ampliamente los 90Kg que había dicho pesar, pero Gideon compensaba el sobrepeso con su acusada delgadez, consecuencia de un grave proceso médico del que estaba recuperándose. Luego supe que precisamente este había sido el motivo de la reunión de todos los hermanos: celebrar que seguían juntos, sin tener que esperar a las reuniones familiares de las Navidades. Entonces vendrían las esposas, los hijos y los nietos... pero ahora tenían un largo fin de semana para ellos solos.
“Los equipajes en la bodega, por favor”.
“¡¡Pero si tenemos sed en el viaje, ¿qué vamos a beber?!!”
“Hay un botellín de agua por pasajero, pero recuerden que el vuelo durar unos 55'... y no hay baño en el avión”
El peso del equipaje también era “aproximado”. ¡Madre del amor hermoso, qué cantidad de comida y bebida para tres días!. La política de la empresa en este sentido es estricta: El único líquido permitido en la cabina es el agua, en la cantidad suficiente para “matar” la sed. Ya habíamos tenido experiencias de cervezas y refrescos derramados, que obligaban a desmontar los asientos para lavarlos en condiciones, así que unas botellitas de agua solventaban el asunto.
Adam apareció a la carrera, disculpándose por el retraso de última hora al salir de su empresa, y en un periquete los siete hermanos se abrochaban los cinturones en los asientos asignados para distribuir el peso correctamente. No nos sobraba mucho tiempo para poder llegar antes del ocaso, y un molesto Sol acercándose al horizonte haría el vuelo más incómodo para el piloto.
![]() |
Mejor subimos a 11.000'... |
![]() |
Challis, un alternativo... |
![]() |
Lower Loon; si, en el morro, al lado del río |
No hizo falta ni clavar los frenos como en otras ocasiones, aunque la deceleración tampoco fue suave, claro. Apurando toda la pista posible di la vuelta para dejar el avión listo para salir de nuevo y paré el motor a los 55' de haberlo arrancado. Entonces Benjamín rompió el silencio en el que había quedado la cabina:
“¡¡La leche!!¡¡Menudo aterrizaje!!¡¡Sólo estos últimos 10' hacen que merezca la pena el esfuerzo de venir aquí!!
![]() |
Listos para arrancar y salir por la 34 |
En menos de lo que se cuenta, los siete ya habían desembarcado y sacado las provisiones y el equipaje de la bodega, ayudados por Fred, que los dirigía a empujar el avión para acercarlo lo más posible al comienzo de la pista.
“Gracias, Fred. Ahora voy con muy poco peso y tenemos pista “suficiente". El domingo será otra cosa... ¿Están listos tus hijos?”
Y tanto que lo estaban; ya habían metido sus macutos en la bodega y aguardaban un gesto para subir al avión.
“Bueno, bueno, tenemos prisa, pero no tanta... " Antes de salir tenía que llamar para confirmar la llegada y activar el plan de vuelo de vuelta, revisar el avión, confirmar que los 66 galones de sopa necesarios ... y utilizar el baño detrás de los matorrales. El ocaso era a las 20:30, contando pues con más que suficientes 20' para hacer esos trámites y despegar en buenas condiciones de luz. Me faltaban 4 galones, pero con el menor peso y sin tener que hacer una larga aproximación, calculé que serían suficientes para llegar con el margen de 45' de vuelo de reserva.
Mis pasajeros eran Thomas, un desgarbado adolescente con la cara marcada por el acné, deseoso de volver a la “civilización”; y Julia, una muchacha con aires calmado, pero muy curiosa, que dejaba el instituto para ir a la universidad ese otoño. Cuando les pregunté quien quería ir como copiloto, la respuesta de la muchacha contrastó con el desdén del chico, de forma que no hubo discusión al respecto. Subimos al avión, puesta en marcha y a las 20:20 despegábamos de vuelta a Idaho Falls.
![]() |
Directos a KIDA |
![]() |
Virando a final de la 21 |
a unos confortables 500'/min así que empezaríamos a bajar a unas 80NM, y con estos números nos metimos directamente en una base derecha a la 21 estando en contacto visual sin tráficos en la zona.
La toma no tuvo mayor historia, rodando por la primera salida a la izquierda y parando el motor en el aparcamiento a las 21:10, con 32,5gal de combustible en los depósitos.
Bajamos del avión mientras Isaac, el mecánico, le ponía los calzos y las protecciones en los elementos sensibles. Deberíamos repostar ahora, pero quería hacer unas comprobaciones primero y ya era hora de ir a descansar, de manera que me despedí de nuestros pasajeros y, tras acabar con el papeleo, di la jornada de vuelo por concluida.
“Isaac, ¿una cervecita en el Snow Eagle?”
“No, ya estará cerrado, pero nos da tiempo a llegar al Tap-N-Fill, que además tengo familia en el negocio”
“Pues venga, allí nos vemos”
Vuelo preparado con Little Navmap.